El que compra productos en grandes cantidades directamente de productores o distribuidores, para almacenarlos y revenderlos a otras compañías, estamos ante la presencia de un mayorista. Estos son responsables de comprar productos a los fabricantes y llevarlos sus propios mercados.
¿Pero cómo se puede distinguir a un buen mayorista?
Son muchos los atributos que pueden separar a un buen mayorista de un revendedor o de un mayorista poco confiable, y la mayoría de ellos están relacionados con la forma como lleva su negocio y la forma como maneja las relaciones dentro de su mercado.
Un buen Mayorista
- Un buen mayorista se distingue por brindar un buen servicio, lo que hace que mantenga una alta reputación dentro de su mercado, lo que eleva el nivel de recomendaciones.
- Un buen mayorista se distingue por siempre cumplir con lo que ofrece, en términos de calidad y precio.
- Un buen mayorista por norma general, debe estar preparado para proporcionar el volumen de productos necesarios, para satisfacer las necesidades de sus clientes, haciéndo llegar de manera responsable, confiable y oportuna.
- La mayoría de los buenos mayoristas solo venden productos a pequeños o grandes comerciantes, así que asegúrese de que los bienes que les proporcione un mayorista, no incluyan ciertos impuestos que solo se agregan a las compras de los consumidores.
- Si el mayorista almacena productos de un distribuidor fuera de su jurisdicción nacional, los impuestos locales no están incluidos. La agencia receptora del revendedor recaudará el impuesto de importación.
- Si se incluyen impuestos como el impuesto de valor agregado (IVA), el proveedor no es un buen mayorista, sino un revendedor.
Cuando compras productos a empresas mayoristas que no se encuentran en tu país, asegúrate de que te puedan proporcionar la información reglamentaria que necesitas de cada producto que quieras revender. - Los términos y condiciones, las líneas de crédito y la ubicación son factores claves que determinan, si estamos ante la presencia de un buen mayorista.
- Siempre obtener un precio más económico es más atractivo y hasta mejor para las finanzas del comprador, pero eso no es necesariamente una señal de que estemos frente a un buen mayorista.
- Si el producto no es adecuado para su propósito o el proveedor no puede mantener un suministro estable para satisfacer sus necesidades, entonces el precio más barato no tendrá valor.
Antes de comprar a un mayorista
Por muy buena que sea la reputación de un mayorista, siempre es aconsejable investigar, revisar y contactar a los mayoristas para asegurarse de que pueden proporcionarle de manera responsable y oportuna los productos adecuados para su negocio.
Cuando en determinado momento un buen mayorista no pueda cumplir con un pedido, porque en ese momento no tiene existencia en el inventario de algún producto, no debe ser catalogado de manera negativa. Cuando el comportamiento es reincidente es hora de cambiar de mayorista.
En definitiva, un buen mayorista se puede identificar por todos los factores anteriormente señalados, que pueden tener una prioridad diferente según las necesidades específicas de tu empresa.